La tradición de San Jorge en Grisel es curiosa sobre todo por el motivo por el que se celebra esta festividad. En este día se conmemora un hecho acaecido alrededor de un 23 de abril de hace unos 400 años.
Cerca de Grisel se encontraba el pequeño poblado de Samangos, sus habitantes así como los de Grisel, dependían del Cabildo de la Catedral de Tarazona desde mediados del siglo XIV. En 1526 ambos pueblos se encontraba habitados mayoritariamente por moros, más tarde llamados moriscos tras su obligada conversión al cristianismo.